El acoso laboral es un problema grave y por desgracia bastante común. Cada año, la Comisión para la Igualdad de Oportunidades en el Empleo (EEOC) recibe alrededor de 12.000 casos de acoso en el trabajo en todo el país. 

Sufrir este tipo de acoso puede dañar seriamente el bienestar emocional y físico de una persona. Por ello, es fundamental saber identificar cuándo una situación se convierte en acoso laboral para poder defenderse adecuadamente. 

¿Qué es acoso laboral?

Se define como cualquier conducta en el entorno de trabajo que sea discriminatoria, intimidante, hostil u ofensiva, y que interfiere con el rendimiento del empleado.

Según la ley de California, específicamente el Fair Employment and Housing Act (FEHA), este tipo de comportamiento no solo es inapropiado, sino también ilegal cuando se basa en características protegidas como raza, género, orientación sexual, nacionalidad, religión, discapacidad, entre otros.

El acoso laboral puede manifestarse de diversas formas, que incluyen:

• Sexual: comentarios no deseados, contacto físico inapropiado o proposiciones sexuales.
• Cibernético: uso de plataformas digitales para intimidar, avergonzar o degradar a alguien.
• Psicológico: manipulación, amenazas o tácticas para infundir miedo o subyugar emocionalmente a otros.

• Verbal: insultos, burlas, comentarios despectivos o amenazas relacionadas con las características protegidas de un empleado.
• Visual: exhibición de imágenes, gestos u objetos ofensivos relacionados con las características protegidas. 
• Por razones políticas, religiosas, étnicas o de raza: ataques o comentarios discriminatorios basados en las creencias, origen étnico o raza de un empleado. 
• Por represalias: trato hostil o acciones negativas contra un empleado por denunciar acoso o discriminación.

Ejemplos de acoso laboral en California

Para que tengas una mejor idea de qué es el acoso laboral, veamos algunos ejemplos:

• Un supervisor hace comentarios constantes sobre el aspecto físico de una empleada de manera sexualizada.
• Un grupo de empleados utiliza términos despectivos para referirse a un compañero de trabajo de una etnia diferente.
• Un colega muestra imágenes sexualmente explícitas a un empleado sin su consentimiento. 
• Un trabajador recibe correos electrónicos de colegas que contienen bromas sobre su orientación sexual o religión.
• Un jefe toca inapropiadamente a un empleado o solicita favores sexuales a cambio de beneficios laborales. 
• Un trabajador es degradado o despedido por negarse a las insinuaciones sexuales de un supervisor.
• Un grupo de compañeros excluye y ridiculiza constantemente a un empleado debido a una discapacidad. 

Es importante tener en cuenta que para ser considerado ilegal según las leyes de California, el acoso laboral debe ser: 

1. Un patrón de conducta recurrente o severo y no un incidente aislado o menor; y
2. Ser basado o motivado por una característica protegida (como raza, género, orientación sexual, nacionalidad, religión, discapacidad, entre otros).

Legislación y derechos en California frente al acoso laboral

En California, la legislación principal que aborda el acoso laboral es el Fair Employment and Housing Act (FEHA). Esta ley protege a los empleados de actos discriminatorios y de acoso en el empleo basados en características personales protegidas como la raza, el género, la orientación sexual y la religión. 

Bajo FEHA, aborda esta situación no solo como un problema ético. También lo considera como una violación legal que puede llevar a sanciones severas contra los empleadores que no lo previenen o responden adecuadamente.

Otra ley federal aplicable es el Título VII del Civil Rights Act de 1964 también juega un papel crucial en la protección contra el acoso laboral en Estados Unidos. Este acto federal también prohíbe la discriminación por raza, color, religión, sexo y origen nacional, ampliando así las garantías de los trabajadores. 

Derechos de los empleados bajo la legislación estatal

Los trabajadores en California tienen derechos específicos bajo FEHA que incluyen:

• Derecho a denunciar acoso: pueden presentar quejas directamente a su empleador o a través de agencias estatales como el California Civil Rights Department (CCRD)
• Protección contra represalias: la ley asegura que los trabajadores que denuncian o resisten acoso están protegidos contra cualquier forma de represalia por parte de sus empleadores. Esto incluye despidos, degradaciones o cualquier otra acción adversa que pueda afectar su carrera.

¿Cómo identificar si estás siendo acosado?

Identificar el acoso laboral puede ser complicado, especialmente cuando las líneas entre un liderazgo estricto y el acoso no son claras. Para ayudarte a discernir si lo estás experimentando, te dejamos algunas claves:

Señales del acoso en el lugar de trabajo

• Comentarios o bromas despectivas: repetición de comentarios que menosprecian tus capacidades, origen, preferencias personales o identidad.
• Exclusión intencionada: ser dejado de lado sistemáticamente en reuniones, correos electrónicos o actividades donde tu participación es crucial para tu función.
• Críticas constantes: recibir críticas constantes sobre tu trabajo que no son constructivas y que parecen tener como objetivo minar tu autoestima y profesionalismo.
• Intimidación o amenazas: encarar conductas intimidantes, como gritos, amenazas de despido sin fundamento o la imposición de miedo para obtener obediencia.
• Sobrecarga de trabajo: asignación de cargas de trabajo irrazonables que no se alinean con tus funciones o plazos imposibles, especialmente si esto no se aplica a otros colegas.

¿Cómo diferenciar entre un ambiente laboral exigente y uno acosador?

Es fundamental saber distinguir entre un jefe que es exigente y uno que acosa. Un ambiente laboral exigente se caracteriza por:

• Altas expectativas: se espera que todos los empleados cumplan con estándares altos, pero razonables, y las expectativas se comunican claramente.
• Feedback constructivo: las críticas se dan de manera que fomentan el crecimiento y la mejora, no humillan.
• Igualdad de trato: todos los empleados reciben desafíos similares y se les juzga con equidad.

Por contraste, en un ambiente acosador, las acciones del jefe, supervisores o compañeros tienden a ser personales, desproporcionadas o injustas y están diseñadas para excluir, intimidar o degradar.

Estos ejemplos te ayudarán a entenderlo mejor:

Escenario 1: Imagina que, durante las reuniones, un supervisor constantemente interrumpe o desestima tus ideas, pero luego elogia o escucha atentamente a otros con ideas similares. Si el motivo de la conducta de tu supervisor se basa en una característica protegida o es una represalia, podría ser un indicio de acoso basado en discriminación.

Escenario 2: Supón que te asignan sistemáticamente más trabajo que a tus colegas, con expectativas de completarlo en plazos no realistas, lo que afecta negativamente tu salud mental y física. Si el motivo de esta conducta se basa en una característica protegida o es una represalia podria ser considerado como acoso.

Estos ejemplos ilustran cómo se puede manifestar el acoso en el lugar de trabajo y te ayudarán a evaluar mejor tu propia situación. 

Si identificas patrones similares en tu entorno laboral, podría ser el momento de buscar asesoramiento o tomar medidas para abordar la situación.

¿Cómo defenderse y denunciar el acoso laboral?

Cuando enfrentas situaciones de acoso laboral, es fundamental saber cómo reaccionar de manera efectiva para proteger tus derechos y bienestar. Aquí te explicamos qué hacer para proceder con una queja formal.

Pasos iniciales

Documentación de incidentes

Es importantísimo documentar cada incidente de acoso tan pronto como ocurra. Anota la fecha, hora, lugar, lo que sucedió, y cualquier testigo que estuviera presente. Esta documentación será de gran ayuda como evidencia si decides proceder con una queja formal.

Comunicación con el acosador

Si te sientes seguro y consideras que es apropiado, puedes intentar resolver la situación comunicándote directamente con la persona que está cometiendo el acoso. 

A veces, el acosador no es consciente del impacto de sus acciones y un diálogo abierto podría resolver el problema. Sin embargo, si sientes que esta acción podría ponerte en una situación de mayor riesgo o incomodidad, es recomendable omitir este paso.

¿Qué pruebas necesitas para denunciar acoso laboral?

Si decides tomar medidas contra el acoso laboral, es fundamental contar con evidencia sólida que respalde tu caso. Estos son los tipos de evidencia que puedes recopilar y cómo cada uno puede fortalecer tu denuncia.

Comunicaciones escritas

Cualquier forma de comunicación escrita puede ser crucial como evidencia. Esto incluye correos electrónicos, mensajes de texto, notas escritas o cualquier otra correspondencia donde el acoso sea evidente. Guarda copias de todas las comunicaciones que demuestren un patrón de acoso o comportamiento inapropiado.

Testimonios y relatos de testigos

Los testimonios de personas que han presenciado el acoso son en extremo valiosos. Pueden ser colegas que estuvieron presentes durante los incidentes o que hayan experimentado trato similar. Asegúrate de documentar sus relatos y, si están dispuestos, obtener declaraciones escritas de su parte.

Registros de incidentes repetidos o patrones de comportamiento

Mantener un registro detallado de todos los incidentes puede ayudar a establecer un patrón de comportamiento acosador. Anota las fechas, horas, lugares específicos y una descripción detallada de cada incidente. Esto no solo es útil para recordar los detalles con precisión, sino que también demuestra la frecuencia y gravedad del acoso.

Estas evidencias apoyarán tu caso al momento de presentar la queja, pero también serán fundamentales si decides llevar el asunto ante instancias legales.

Proceso formal de quejas

Cómo y a quién presentar una queja dentro de la empresa

La mayoría de las empresas tienen políticas y procedimientos establecidos para manejar quejas de acoso. En la mayoría de los casos, es crucial que los sigas. Revisa el manual del empleado o consulta con el departamento de recursos humanos para saber a quién puedes dirigirte. 

Es importante que tu queja sea escrita y que guardes una copia para tus registros. Asegúrate de describir los incidentes con detalle, proporcionando toda la documentación que hayas reunido.

Uso de recursos externos   

Si la respuesta de la empresa no es satisfactoria, o si tu empresa no tiene políticas o procedimientos de denuncia, puedes presentar una queja ante el CCRD o EEOC. Estas organizaciones pueden investigar tu caso y, de ser necesario, tomar acciones legales en tu nombre.

Otra alternativa es consultar con abogados de acoso laboral. Un abogado especializado en esta área puede proporcionar una orientación más personalizada y representación legal si decides llevar tu caso a los tribunales.

Además, la mayoría de los abogados laboralistas trabajan en asuntos de acoso en régimen de contingencia, lo que significa que si no recuperan ninguna indemnización para ti, no tienes que pagar los honorarios ni los costes. 

Estos pasos no sólo te ayudarán a manejar la situación de acoso de manera más efectiva, sino que también contribuirán a proteger tu entorno laboral y el de tus colegas. Recuerda, no estás solo y tienes derecho a trabajar en un ambiente libre de acoso.

Rol de los abogados en los casos de acoso laboral

En esta situación, contar con un abogado puede ser crucial para proteger tus derechos y buscar justicia. 

Los profesionales del derecho especializados en acoso laboral están capacitados para ofrecerte orientación legal y representación en casos donde se haya violado tus derechos en el lugar de trabajo. Ellos pueden ayudarte a:

• Interpretar la ley: explicarte tus derechos según las leyes estatales y federales y cómo aplican a tu situación específica.
• Evaluar tu caso: determinar la viabilidad de tu reclamo basado en la evidencia y los detalles que puedas proporcionar.
• Preparar la documentación: ayudarte a recopilar toda la evidencia necesaria y preparar los documentos legales para formalizar tu denuncia.
• Negociar acuerdos: representarte en negociaciones con tu empleador o su representante legal para buscar una resolución justa.
• Litigar tu caso: si es necesario, llevar tu caso a juicio para defender tus derechos y buscar compensaciones.

El proceso típicamente comienza con una consulta inicial, donde el abogado evalúa tu caso. Durante esta reunión, es importante ser claro y proporcionar toda la información y evidencia que tengas. Basado en esta evaluación, el abogado puede decidir representarte. 

A partir de ahí, él o ella te guiará a través del proceso legal, desde la presentación de la queja hasta el litigio, si fuera necesario. Este proceso puede incluir negociaciones para llegar a un acuerdo o preparación para un juicio.

Es importante reiterar que no tendrás que pagar por adelantado a la mayoría de los abogados laborales por sus servicios. Lo normal es que sólo te cobren si consiguen recuperar dinero en tu nombre. En ese caso, el abogado cobrará sus honorarios y el reembolso de los gastos del caso de tu acuerdo de indemnización o premio del juicio.

En plataformas como Judigo Legal puedes tener acceso gratuito y rápido a abogados expertos en esta área. Para hacer tu consulta, basta con registrarte. Después de iniciar la interacción, recibirás respuestas de abogados verificados.

¿Cómo seleccionar un abogado especializado en acoso laboral?

Para elegir al abogado correcto, te recomendamos considerar los siguientes criterios: 

• Experiencia: busca un abogado que tenga experiencia específica en casos de acoso laboral. Revisa su historial de casos y resultados.
• Recomendaciones y reseñas: considera las opiniones de otros clientes que hayan trabajado con el abogado.
• Accesibilidad y comunicación: elige a alguien con quien te sientas cómodo hablando y que esté disponible para resolver tus dudas a lo largo del proceso. Afortunadamente, en Judigo Legal, puedes encontrar abogados compasivos y expertos que hablan tu idioma.
• Estructura de tarifas: entiende cómo cobra el abogado. Algunos pueden ofrecer consultas iniciales gratuitas o trabajar basándose en contingencia, donde solo cobran si ganas el caso.

Contar con el apoyo de un abogado especializado puede marcar la diferencia en cómo se resuelve tu caso de acoso laboral. 

Prevención del acoso laboral en el lugar de trabajo

Los empleadores en California tienen obligaciones claras bajo FEHA para prevenir y responder efectivamente al acoso laboral. Estas son algunas estrategias y prácticas que pueden implementar:

1. Políticas claras: deben establecer y mantener políticas claras contra el acoso que sean conocidas y accesibles para todos los empleados.
2. Formación y educación: es esencial que proporcionen formación regular sobre acoso y discriminación a todos los niveles de la organización, especialmente a los supervisores y gerentes.
3. Investigaciones prontas y efectivas: al recibir una queja de acoso, los empleadores deben llevar a cabo una investigación rápida y exhaustiva para determinar los hechos.
4. Acciones correctivas: si se encuentra que ha ocurrido acoso, los empleadores deben tomar acciones inmediatas para detener el acoso y prevenir su recurrencia. Esto puede incluir la disciplina del acosador, cambios en las políticas de la empresa o incluso despidos.

Entender y enfrentar el acoso laboral es crucial para garantizar un entorno laboral seguro y respetuoso para todos. Por ello, debes aprender a reconocer las señales de acoso, cómo documentar incidentes y la manera adecuada de presentar quejas, tanto internamente como a través de recursos externos. 

El conocimiento de estos procesos empodera a las víctimas para que no se sientan solas y sepan que tienen herramientas y apoyo a su disposición.

Además, es fundamental que cada persona en el ámbito laboral tome un papel activo no solo en defender sus propios derechos, sino también en apoyar a otros que podrían estar enfrentando situaciones similares. 

Alentar a las víctimas a hablar y buscar ayuda es un paso crucial para cambiar la dinámica de poder que a menudo sustenta el acoso laboral en Estados Unidos.